Cofre paralelepipedico con estructura de madera revestida de laminas repujadas de bronce que apoya sobre cuatro patitas torneadas. Cada una de sus caras y la cubierta se recubren con decoración de jugosos tallos vegetales sobre fondo picado enmarcando clípeos avenerados donde se representan cabezas masculinas de riguroso perfil protegidas por yelmos, incorporando en la chapa frontal y trasera recerco de cueros recortados, todo ello de clara inspiración renacentista. Pieza única.