Juguete de fabricación artesanal que reproduce en miniatura un vehículo de dos ruedas siguiendo la morfología y componentes de los carros tradicionales del País: lanza para enganchar el animal de tiro, cama donde colocar los objetos a transportar, eje con ruedas macizas sujetas mediante clavo de madera pasante y llanta de chapa de hierro.
Procede del caserío Zabala en el barrio de Oba, Dima, Bizkaia, donde se utilizaría por los niños de la casa como juego de imitación de adultos.
La reproducción de elementos del mundo de los mayores a escala reducida ha sido una de las formas más utilizada en la sociedad tradicional para divertimento y educación de los niños quienes, a través de juegos y juguetes, irán familiarizándose con los trabajos que de mayores desempeñarán. En este caso concreto, el niño participará en compañía de un adulto, y cada uno con su carro, del transporte de leña, hierba, y otros productos del caserío.