Vasija de barro de cuerpo ovoide, cuello recto muy corto y boca con labio de borde engrosado, cuerpo con aros en forma de cordón a modo de refuerzo y decoración. En la parte inferior, protuberancia a modo de pitorro de desagüe.
Procede del antiguo convento de las Siervas de Maria erigido en 1905 en la bilbaína calle del Campo de Volantín y derribado tras las inundaciones de 1983. El convento actual se inauguró el 8 de septiembre de 1990.