Forma circular con un saliente a modo de colgador. Tiene anverso, el cristal que se abre protege la esfera blanca con las dos manecillas. En el reverso, la tapa toda en plata y repujada, que proteje a la cuerda, está inscrito la marca. En la tapa inscrito 27, 1615, 1841. Perteneció a Tomás Zumalacarregui.