Paño de ofrendas de lino blanco, bordado en telar con hilo azul de algodón. Es de una única pieza de una "kana" (vara) de ancho. Presenta flecos en sus dos extremos menores. Procede de Olazagutía (Navarra). Comprado en 1920.
Los lienzos para ofrendas estaban por lo general ricamente adornados, debido a su función. Sobre ellos se colocaban las ofrendas en la iglesia; es decir, cada familia, representada por la señora de la casa, colocaba sobre el lienzo sus ofrendas; de hecho, las ofrendas que se colocaban sobre el lienzo, a su vez extendido sobra la sepultura familiar, solían ser de pan y luz (velas), dedicadas a los familiares difuntos. Incluso cuando se dejó de enterrar a los muertos dentro de la iglesia cada casa siguió ocupando el mismo espacio, donde hacía las ofrendas de luz.